Notas al programa

En algún momento de la historia, alguien se inventó la división entre arte y artesanía. “Los artistas serán los que se inspiran en nociones elevadas y los artesanos… esos sudan, que es cosa de pobres”, debió de pensar. Quien quiera que fuera el que pergeñó tal ocurrencia no debía de andar muy alejado de aquél que consideró que debía existir una barrera estricta entre la música popular y otra cosa llamada música culta o clásica. Afortunadamente para los amantes de las grandes obras de la creación humana, siempre hubo importantes huecos en esas fronteras aparentemente tan sólidas. Pero algunos creadores han tomado la fusión entre estilos como un gesto deliberado, casi como una reivindicación. Ejemplos de ello escucharán ustedes en los conciertos de esta semana. Además, en consonancia con estas fechas en las que festejamos el 25º aniversario del primer concierto de la OEX, el programa luce el elocuente título que pueden leer más arriba. La celebración en múltiples formas: la energía urbana que late en la obra de Jimmy López, el humor refinado de Stravinski y, en Appalachian Spring, la exaltación de una comunidad basada en la sencillez como pasado idealizado y cimiento para el futuro.

Con ¡Fiesta!, el compositor peruano Jimmy López Bellido construye un puente entre la pista de baile y la sala de conciertos. Los cuatro movimientos —Trance 1, Countertime, Trance 2 y Techno— reimaginan la energía de la música electrónica a través de la orquesta sinfónica, que late con el pulso propio de un sintetizador de materia viva. Fiesta fusiona rasgos de estilos distantes, pero, lejos de una mera yuxtaposición, se constituye como celebración de lo colectivo: un recordatorio de que el ritmo sigue siendo un lenguaje universal. El primer y tercer movimientos emplean el término trance, propio de la música techno, caracterizado por patrones rítmicos hipnóticos y repetitivos, que se materializan en ostinatos y pedales en la orquesta en un intento de trasladar la intensidad casi ritual de la música urbana contemporánea al ámbito sinfónico. El segundo y cuarto movimientos suponen un despliegue de energía rítmica de principio a fin. Los pulsos de la música electrónica se entremezclan en el último número con ritmos latinoamericanos como ondeando triunfalmente la bandera de la fusión de estilos.

En Juego de cartas, Stravinski nos invita a otra forma de celebración: el juego, como dimensión lúdica pero también como escenario para la estrategia en una partitura neoclásica que transforma una partida de póker en un ballet de ingenio y teatralidad. El Joker, sibilino y camaleónico protagonista, desafía a las demás cartas en tres “manos” musicales, donde la ironía y el virtuosismo se dan la mano. Estrenada en 1937 por el American Ballet en Nueva York, la partitura está trufada de citas más o menos explícitas de autores como Rossini o Beethoven, siempre huyendo de la exuberancia y la solemnidad o, más bien, parodiándolas.

Aaron Copland escribió la música de Appalachian Spring para el ballet de Martha Graham por encargo de Elizabeth Sprague Coolidge en 1944. La obra, que pronto obtendría éxito en las salas en su versión como suite de concierto, le valió el Premio Pulitzer en 1945. Appalachian Spring en su forma y contenido representó una materialización explícita de la visión antielitista del arte de Copland: música de calidad escrita para el pueblo, abierta, diáfana, de líneas amplias y armonías transparentes. El ballet, ambientado en una pequeña comunidad de los Apalaches en el siglo XIX, presentaba personajes arquetípicos que encarnaban los valores originales de la sociedad estadounidense. «Después de que Martha me diera este esbozo, supe ciertas cosas cruciales: que tenía que ver con el espíritu pionero americano, con la juventud y la primavera, con el optimismo y la esperanza», escribiría el propio Copland. Graham extrajo el título del ballet de un poema de Hart Crane cuya obra supuso una gran inspiración para ella en la escritura del guión. Y Copland secundó punto por punto la idea de la bailarina y coreógrafa y escribió una partitura destinada a representar los valores comunitarios que habrían sido degradados en el siglo XX. Copland y Graham presentan, al fin y al cabo, una utopía retrospectiva: un pasado idealizado de comunidades sencillas como contrapunto a la corrupción de la vida urbana y como una suerte de referencia para la construcción de la sociedad futura. Copland deja claras sus intenciones incluso en el tratamiento del material musical: como base para una serie de variaciones, emplea la melodía de un himno shaker titulado Simple Gifts (Dones sencillos), una celebración de la sencillez como base para una vida buena.

La Orquesta de Extremadura plantea tres propuestas para este concierto diverso en el que el eclecticismo y la fusión de estilos y caracteres se produce con naturalidad, como si nunca hubieran sido inventadas las barreras en el arte de la música: el frenesí contemporáneo de López, el ingenio lúdico de Stravinski y la esperanza colectiva de Copland. Una convicción planea en todo el programa: la música, al igual que la fiesta, no pertenece a nadie y pertenece a todos. Disfruten de la celebración.

© Santiago Pavón

Violinista de la Orquesta de Extremadura y Licenciado en Ciencias Políticas y de la Administración. Es divulgador y presenta las charlas previas a los conciertos de la temporada de la Orquesta de Extremadura.

Interpretaciones anteriores

La Orquesta de Extremadura tiene un solo precedente con Juego de cartas, de Stravinski, fue el 28 y 29 de enero de 2005, dirigida por Dorian Wilson, en Gran Teatro de Cáceres y Teatro López de Ayala de Badajoz, respectivamente.

La Primavera apalache de Copland se interpretó por primera vez el 19 de mayo de 2006 en el Gran Teatro de Cáceres, dirigida por Christopher Wilkins. La ocasión más reciente ocurrió el 9 de mayo de 2014, también en el Gran Teatro de Cáceres, dirigida por Álvaro Albiach.

Nicolò Umberto Foron

Nicolò Umberto Foron es un director de orquesta germano-italiano cuyo talento ha sido reconocido con importantes galardones, entre los que se incluyen el prestigioso Concurso de Dirección «Donatella Flick» en marzo de 2023 y el Concurso Internacional de Dirección «Jeunesses Musicales» en Bucarest en 2021. Actualmente es director asistente de la Orquesta Sinfónica de Londres.

Nicolò Foron ha aparecido en múltiples ocasiones en Classic FM, donde sus vídeos han obtenido millones de visitas, y también ha sido nombrado uno de los artistas «30 Under 30» de 2025.

En los últimos años, Nicolò Foron ha colaborado con una amplia gama de orquestas distinguidas, entre las que se incluyen la Orquesta Sinfónica de Londres, la Mozarteumorchester Salzburg, la Staatskapelle Weimar, la Opéra national de Montpellier, la Orquesta Sinfónica de Flandes, la Orquesta Sinfónica Nacional de la RAI (Turín), la Orquesta Filarmónica de Friburgo, la Ópera Nacional de Lorena, la Orquesta Nacional de Île-de-France, la Orquesta Sinfónica Alemana de Berlín y la Orquesta de Cámara de Lausana. Además, ha dirigido actuaciones en la Elbphilharmonie de Hamburgo con la Deutsche Stiftung Musikleben y ha debutado en la Wiener Konzerthaus con la Wiener Kammerorchester. También ha dirigido la Orquesta Filarmónica de Pannon en una gira con Viktoria Mullova, así como el Ensemble Intercontemporain y la Arktisk Filharmoni, con actuaciones en prestigiosas salas como el Concertgebouw de Ámsterdam y Die Glocke de Bremen. En febrero de 2025, dirigió tanto a la BBC Symphony Orchestra (Barbican) como a la Helsinki Philharmonic Orchestra (Musiikkitalo), interpretando una mezcla de estrenos mundiales y repertorio altamente especializado. Otros conciertos incluyen la Bremer Philharmoniker, Cameristi della Scala, Rotterdams Philharmonisch Orkest, Euskadiko Orkestra (Orquesta Nacional del País Vasco) y la Odense Symfoniorkester.

En la temporada 2025-2026, Foron dirigirá una dinámica serie de actuaciones en el Festival MiTo SettembreMusica y con orquestas como la SWR Symphonieorchester, la Orquesta de Extremadura, una gira con la Orchestra Haydn, la Orchestra Sinfonica Nazionale della Rai, la Royal Philharmonic Orchestra, la Filarmonica Arturo Toscanini, la Orchestre de Chambre Nouvelle-Aquitaine y la Sächsische Staatskapelle Dresden, entre otras. También volverá a la Arktisk Filharmoni y a la Cameristi della Scala.

Reconocido por su versatilidad, Foron ha dirigido numerosos estrenos mundiales, en particular con el Ensemble intercontemporain, y destaca tanto en el repertorio sinfónico como en el operístico. Entre sus logros operísticos se incluyen representaciones de Las bodas de Fígaro (Riccardo Muti Italian Opera Academy), Hansel y Gretel (Staatskapelle Weimar) y la opereta de Walter Kollo Jettchen Gebert (Musikalische Komödie Leipzig), además de estrenos de óperas contemporáneas holandesas.

La carrera musical de Foron comenzó a una edad temprana, estudiando dirección, composición y piano, siendo este último su primer instrumento. Se formó con pianistas de renombre como K.H. Kammerling y A. Ugorski y comenzó a estudiar dirección con Jorma Panula a los 10 años. Sus extraordinarias habilidades llamaron la atención de Bernard Haitink, quien lo invitó a los 16 años a participar en clases magistrales en el Festival de Lucerna. A los 16 años, Foron comenzó sus estudios formales de dirección en el Conservatorio de Ámsterdam, seguidos de un máster en el Royal College of Music y un diploma avanzado en interpretación en la Royal Academy of Music de Londres, donde se graduó en 2021. Sigue actuando como pianista de concierto, colaborando a menudo con su hermana, la violinista Mira Foron.

Durante el confinamiento por la pandemia, Foron dirigió la Noord Nederlands Orkest en una retransmisión en directo y una grabación en CD con el Concierto para violonchelo de Jan-Peter de Graaf, lo que le valió una nominación al premio alemán Schallplatten. En 2023, fue nombrado Artista Residente por la Radiotelevisión Nacional Alemana, un honor que incluía tanto un concierto como una grabación en CD con la Deutsches Symphonie-Orchester Berlin. El CD se publica por Deutsche Grammophon/Avi en el verano de 2025.