Thomas Clamor
Como director, profesor y embajador musical cruza todas las fronteras, Thomas Clamor, sabe transmitir su dedicación y entusiasmo a sus músicos y su audiencia. Además de ser el principal director de la Sächsische Bläserphilharmonie (Orquesta Filarmónica de Sajonia), es un director invitado internacionalmente por varias orquestas sinfónicas y conjuntos de música de cámara de todo el mundo. Un gran número de grabaciones de audio, video y radio documentan el rasgo estilístico de su obra artística.
Thomas Clamor fundó la European Brass Ensemble, con sede en Austriam en la Abadía de Melk (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO), así como también fundó el Venezuelan Brass Ensemble, que lo situó en los mejores escenarios del mundo. Ha dirigido, entre otros, el Festival de Salzburg, el London Proms, el Carnegie Hall y la Filarmónica de Berlín, y es un invitado bien recibido por muchas orquestas en China, Corea, América del Sur y Europa.
En su labor pedagógica, Thomas Clamor asume continuamente nuevos retos. Desde 2011 ha sido director de la German Wind Academy. Fue profesor invitado en Weimar y Detmold y es profesor Honoris Causa en el Conservatorio de Música de Shanghái. En la Escuela de Música Hanns Eisler de Berlín sentó las bases para crear el departamento de Comunicaciones Musicales e inició proyectos de apoyo social para zonas con dificultades de Berlín con varios de sus alumnos. Los problemas sociales también son el motor de “El Sistema” en Venezuela, uno de los proyectos sociales más importantes a nivel mundial, que parte de la idea del poder de la música para poder cambiar la sociedad. Durante 15 años, el trabajo de Thomas Clamor allí se ha mantenido en alta estima, ya que ofrece a los niños y adolescentes una visión y oportunidad para el futuro.
Durante muchos años la Filarmónica de Berlín fue la casa musical de Thomas Clamor. En 1986 Herbert von Karajan contrató al trompetista como el miembro más joven de la orquesta. Siguió siendo miembro de la Filarmónica durante más de 20 años. Durante este tiempo se familiarizó con los escenarios más importantes del mundo y día a día trabajó con los solistas y directores relevantes del momento.
A día de hoy Thomas Clamor trabaja y conduce con el más alto nivel de intercambio artístico. En 2015 fue galardonado con una Orden del Mérito alemana. Con su excelencia artística, es un modelo ejemplar de alguien que no sólo hace contribuciones sociales impresionantes sino que también participa activamente en la educación nacional e internacional. Thomas Clamor nunca se presenta en el escenario como un músico, sino como una persona entera. A través de su arte y proyectos, muestra lo importante que es la música para cada individuo y lo que el arte puede lograr en la sociedad.